Entre 1989 y 1990, mientras estudiaba la maestria en ESAN, todo era obligación y no había tiempo para nada: clases, lectura, trabajos en grupo, tareas, hacer turnos para las asesorías, etc.
En medio de tanta obligación, decidí dedicar algunos minutos del día en recorrer las áreas verdes de la escuela, ahí descubrí vida: ardillas, caracoles, aves de todo tipo y tamaños, insectos de distintas clases y muchos árboles, sentándome sobre el césped por unos minutos al pie de cualquiera de ellos.
Hasta esa fecha no me había dado cuenta lo reparador que significa apoyarse en un árbol, por ello pensando en esos momentos y en homenaje a esos seres vivos, que tanto nos dan y nada nos piden, en el año 1990, al poco tiempo de culminar los estudios, escribí “Arboles”.
Los invito a escucharlo y/o leerlo.
Árboles
Fátima Rodríguez Serra
del Poemario Retórica, 2009
Fátima Rodríguez Serra
del Poemario Retórica, 2009
La siguiente fotografía muestra el estado del otrora Bosque de ESAN.
Miraflores y Barranco deberían tener muchos más árboles de colores, los cuales proveen de oxigeno, nos dan sombra, hermosos paisajes, limpian el aire, airean las calles, reduce la necesidad de grupos de aire acondicionados, previenen la erosión del terreno, son los hogares de la vida silvestre, nos permiten ubicar direcciones, aumentan el valor de los predios y sobre todo nos acompañan cuando estamos solos.
Las flores de estación son lindas, pero demasiado costosas y sólo duran tres meses, creo que es el momento de cambiarlas por los árboles que pueden durar más de 50 años con sólo un poco de agua.
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